Tendinitis de pata de ganso
La tendinitis de pata de ganso es la lesión que tiene lugar en el interior de la rodilla, entre el músculo sartorio y grácil, ya que al ser semimembranoso, se inflama y produce esta dolencia.
La tendinitis es una inflamación localizada en un tendón, en concreto entre las fibras que unen el músculo con el hueso. Suele ser un trastorno muy común y doloroso que puede causar sensibilidad en la parte exterior de la articulación que la sufre. Aunque puede afectar a cualquier articulación, es más probable que aparezca en las del hombro, las muñecas o las rodillas. Es muy frecuente entre personas que practican algún deporte en el que se realicen movimientos muy repetitivos, ya que los cambios tan rápidos y abruptos hacen que las articulaciones tengan que soportar todo el trabajo. Una de las más frecuentes es la tendinitis de pata de ganso.
¿Qué es la tendinitis de pata de ganso?
La tendinitis de pata de ganso es la lesión que tiene lugar en el interior de la rodilla, entre el músculo sartorio y grácil, ya que al ser semimembranoso, se inflama y produce esta dolencia. La función principal de estos músculos es flexionar la rodilla para que se produzca el movimiento y evite el deterioro de los meniscos y las articulaciones.
La tendinitis de pata de ganso se encuentra dentro de las tendinopatías que más dolor causan, ya que por la zona en la que está afecta a la vida diaria. Algunos estudios han determinado que su incidencia en la población es del 60% y que hay una alta correlación de que se produzca en pacientes con enfermedades metabólicas, como las siguientes:
- Diabetes.
- Hipertiroidismo.
- Obesidad.
- Colesterol.
Para determinar y diagnosticar la tendinitis de pata de ganso es necesario acudir a un centro médico para que valore la realización de ciertas pruebas específicas. Las más usuales suelen ser una resonancia magnética o ecografía, por el hecho de que con ellas pueden ver el estado de todas las articulaciones.
Síntomas y causas de la tendinitis de pata de ganso
La principal causa de la tendinitis de ganso está producida por movimientos bruscos de la rodilla y de otras partes del cuerpo. Además de ser una dolencia atribuida a deportistas, es muy habitual en mujeres de mediana edad con una cadera más ancha de lo normal. Esto es debido a que cargan mucho peso en las caderas, que acaban provocando un exceso de carga en las articulaciones de las rodillas y en las extremidades. También existen otras causas de la tendinitis de pata de ganso:
- Pies planos.
- Sobrepeso.
- Artrosis.
- No dejar en reposo el cuerpo después de entrenar.
- Traumatismo severo.
- Calzado poco ergonómico.
- Correr sobre terrenos irregulares.
Al comienzo de la aparición de la tendinitis de pata de ganso, es normal que se sientan molestias leves al caminar o al realizar otro tipo de movimientos con la rodilla. No obstante, los principales síntomas de la tendinitis de pata de ganso son:
- Dolor intenso en la zona del interior de la rodilla.
- Inflamación de la zona dolorida.
- Incapacidad de hacer movimientos como levantarse de una silla.
- Rigidez de la rodilla al despertarse por la mañana.
Para prevenir la tendinitis de pata de ganso es recomendable seguir una serie de cuidados para evitar este tipo de dolencia, ya que no solo afecta a la articulación de las rodillas, sino al resto del cuerpo. Una dieta sana y equilibrada combinada con la práctica de ejercicio regular puede evitar su aparición.
Ejercicios para aliviar la tendinitis de pata de ganso
Cuando se ha realizado el diagnóstico de la tendinitis, es probable que tu médico te recomiende seguir con una serie de ejercicios y ayudas para su alivio. Por ello, las siguientes indicaciones y ejercicios beneficiosos para la tendinitis de pata de ganso te proporcionarán alivio desde el primer día.
- Isquiotibiales: para estirar estos músculos será necesario estar de pie y adelantar una pierna sobre tu cuerpo hacia adelante. La pierna no debe estar del todo estirada, sino más bien flexionada.
- Fisiocrem Spray Active Ice: aliviará las molestias de pequeñas dolencias, proporcionando un efecto frío inmediato. Su fórmula contribuye a la reducción de inflamaciones. Debe aplicarse sobre la zona de dolor pero nunca en heridas abiertas, mucosas, abrasiones y rasguños.
- Abductores: sentado en el suelo, flexiona las piernas hacia adentro como si fueras una mariposa. Mantén la espalda erguida durante unos minutos, sujetando los pies e intentando poco a poco llevar las rodillas al suelo.
- Cuádriceps: de pie con la espalda recta, flexiona la rodilla hasta el glúteo durante unos minutos. Luego intercambia con la otra pierna para completar los estiramientos.
La combinación entre ejercicios y ayudas para aliviar la tensión acumulada incrementa la salud de tus articulaciones. Incluso es beneficiosa para evitar la tendinitis de pata de ganso.
En resumen, el cuerpo humano y en concreto las articulaciones cumplen una función muy importante para el movimiento del cuerpo. Cuando existe una sobrecarga en alguna de ellas, se producen alteraciones como la tendinitis de pata de ganso, aunque con cambios en los hábitos alimenticios y ejercicios físicos se alivian sus síntomas.
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